Nigrum

“Nigrum» de Leonora Carrington evoca la presencia inquietante de un felino y refleja el profundo interés de la artista por la alquimia, el ocultismo y el mundo de los sueños. Su nombre, alude al concepto alquímico de «nigredo», la fase de oscuridad y putrefacción que precede a la transformación. La figura muestra rasgos que recuerdan a un gato, animal que Carrington apreciaba profundamente y que aparece recurrentemente en su obra.